martes, 18 de abril de 2006

How-to arreglar una persiana

Vereis, me levanté yo tan feliz esta mañana porque me había quedado dormida y llegaba tarde a prácticas cuando mi persiana decidió suicidarse. Y es que la pobre tiene un despertar muy malo y a las 8:45 de la mañana, pues es hasta comprensible.

Total, que la dejé rota y taponando totalmente la luz que entraba a mi cuarto - y con las ventanas de fuera cerradas porque no se puede acceder si la persiana está caída- y me fui a clase.

Cuando volví de inglés, allá por las 7 de la tarde -sí, ya sé que terminaba a las 5 pero el ordenador de Alfonso estaba malito y fui a ver si le curaba... aunque no puedo ser-. Iba diciendo, que volví a casa y me encontré a mi persiana mirándome con impotencia y resignación (y con bastante mala leche también). Ordené mi cuarto y cubrí la cama y los armarios con sábanas y comencé la tarea de arreglar una persiana.

Pasos para arreglar una persiana (teoría) con ayuda de otra persona:
  1. Abre el cajetín de la persiana, sujétalo de manera que no se cierre y comprueba que hay baldas nuevas.
  2. Saca las baldas de sobra y acumula toda la cuerda arriba con ayuda de dos pinzas (una arriba y otra abajo).
  3. Haz sobresalir la persiana que esté bien del cajetín para tener mayor facilidad de acceso.
  4. Extrae la balda rota deslizándola hacia un lado manteniendo fijas el resto.
  5. Coloca una balda nueva en el sitio de la anterior encajándola y deslizándola sobre la primera balda no rota de la persiana.
  6. Introduce la persiana en el cajetín y en los raíles.
  7. Haz persión desde arriba hasta que se encaje la balda recién puesta con el resto de la persiana.
  8. Suelta la cuerda y cierra el cajetín.
Bien, la teoría no parece muy complicada pero puedes encontrarte varios problemas como me ha pasado a mí esta tarde:
  • Que la habitación sea demasiado pequeña como para deslizar una balda sobre otra y extraerla o introducirla.
  • Que se desencaje el destornillador que se usa como palanca para introducir la balda a lo bestia.
  • Que una vez introducida perfectamente, no quiera encajarse con el resto al presionarla.
  • Que se suelte la cuerda que sujetaba la puerta del cajetín.
  • Que, por mucho que presiones, la puñetera balda no quiera meterse y acabes descascarillando la balda de arriba del todo.
Finalmente, y tras tres cuartos de hora de intentar meter la balda de las narices, lo hemos conseguido... pero eso sí, hemos acabado los dos -y el cuarto entero- llenos de polvo que había en el cajetín y con un dolor de brazos que tardará en quitarse....

4 comentarios:

Miauz dijo...

Me voy a ver House, que hoy no tengo ganas de trabajar... y con razón xD

Anónimo dijo...

O sea... ¿me estás diciendo que tienes la suerte de que no entre sol en tu habitación y vas y lo... arreglas? Con eso me ahorraba yo las tres cortinas que tengo en mi ventana para convertir mi cuarto en la penumbra de una
fraga encantada
de forma perenne.

Entonces por un generador de bruma artificial ni te pregunto...

Ferguson dijo...

Joder, me he cansado hasta yo leyendo ésto xD

La gracia es que yo tengo mi persiana a medio abrir sin posibilidad de ascenso o descenso desde noviembre.

Anónimo dijo...

Gracias, Sara. Yo tengo una persiana que quiero arreglar. Voy a intentarlo siguiendo tus pasos.