martes, 24 de septiembre de 2013

¿Seguridad? social

Domingo 
2:00 AM
Me quito las lentillas y me hago un poco de daño... será que tenía el ojo seco.

10:00 AM
Ups, tengo el ojo como pegajoso. Me miro en el espejo: miles de legañas alrededor del ojo y el blanco del ojo ya no es blanco sino rojo. Me lo lavo bien y parece que va mejor.

8:00 PM
Uhm... esto sigue molestando. Me echo lágrimas artificiales y parece que se calma... lo dejaremos estar un día.

Lunes
8:00 AM
Ojo rojo y miles de legañas. Uhm... Me lavo el ojo con lágrima artificial.

3:00 PM
Ojo rojo. Miles de legañas. Esto no mejora... voy a pasarme por el centro de salud de aquí al lado a ver qué me dicen.

3:15 PM
Administrativo sin levantar la vista de los papeles: ¿Sí?
Yo: Hola, verá es que tengo el ojo rojo porque creo que me hice daño con la lentilla... y era para ver si me podrían atender de urgencias.
A sin levantar la vista: Pues debería pedir cita con su médico de cabecera, ¿quién es? Y veo que hueco tiene esta semana.
Yo: Es que este no es mi centro de salud, pero como me molesta...
A mirándome con cara de pocos amigos: Es que tiene que ir a su centro de salud. ¿Cuál es? ¿No puede ir para allá?
Yo (mosca): Pues verá, es que está lejos y esto me molesta bastante.
A mirándome con odio: Pues no está tan lejos, puede ir para allá perfectamente. Que eso no es una urgencia, ni que tuviera la pierna rota o algo así.
Yo (cabreada): Sí, pero así tampoco es que pueda conducir, por ejemplo.
A (borde total): Pero no hay gente con un solo ojo que conduce... Anda, voy a ver si le puede atender la doctora.
A (al teléfono en plan quejica): Sí, que hay una muchacha aquí con el ojo que dice que no puede ir a su centro de salud. Que si la atiendes... La doctora le atenderá en un rato.

4:00 PM
Paso a la consulta me mira el ojo desde el otro lado de la mesa.
Médico: Pues parece que sí lo tienes irritado. (Hombre, claro, tengo el ojo rojo e hinchado... ¿no me digas?). Te voy a poner unas gotas para que se te baje la infección y tenlo tapado cuanto más tiempo mejor.

9:00 PM
Después de un buen rato con el ojo tapado con un parche debería de estar mejor... pero me molesta horrores... Me quito el parche. Ojo rojo. Miles de legañas. Otra vez. Esto no es buena señal. Bueno, vamos a darle otro rato. Lavado.

11:30 PM
Ojo rojo. Miles de legañas. Lavado y gotas.

Martes
5:00 AM
Ojo rojo. Miles de legañas. Lavado y gotas.

8:00 AM
Ojo rojo. Miles de legañas. Lavado.... Me voy a urgencias que me vea un oftalmólogo.

9:15 AM
Llegada a urgencias, está casi vacío (¡bien! va a ir rápido). Me pasan a esperar fuera de la consulta de oftalmología. 3-4 personas delante mía.

10:00 AM
Todavía no ha entrado ni salido nadie de la consulta.

10:50 AM
Paso a la consulta. Me mira el ojo la doctora para echarme un colorante y poder mirarme el ojo bien.
Doctora: Oye... si tienes algo ahí. A ver... creo que es la lentilla. Espera que venga mi compañero que es el oftalmólogo.
Oftalmólogo: Sí, está la lentilla ahí. ¿No te la quitaste?
Yo: Yo creía que sí, al menos un buen cacho salió... pero no me fijé si estaba entera.
Oftalmólogo: Pues ahí queda un trozo.
Doctora: Pero mujer, ¿y cómo has aguantado con eso ahí?

10:55 AM
Trozo de lentilla fuera del ojo. Ojo amarillo del colorante, pero ya no duele infinito. Felicidad en aumento.
Doctora: pues te echas estas gotas y nada de lentillas en 20 días.
Yo: Lo que no sé es cómo no lo vieron en el centro de salud.
La doctora me mira y no dice nada.

¿Cómo te quedas?

1 comentario:

Anónimo dijo...

A mi madre le pasó algo así el otro día, fueron de boda, volvieron tarde, se quitó la lentilla y a dormir. A la mañana siguiente casi no podía abrir el ojo así que se fue directa a urgencias (a mí madre le falta un ojo por un tumor así que a la mínima molestia en el otro ojo tira para el médico) un médico inexperto de guardia el domingo la mira y le dice que tiene una pequeña úlcera en la córnea, le pone una pomada y le tapa el ojo por 24 horas. Imagínate, mi madre que sólo tiene un ojo, la mandan taparse el que le queda, menos mal que había ido mi padre con ella. Viene para casa con un vendaje enorme y se mete en la cama porque tiene molestias y como total no ve pues a dormir. A la mañana siguiente sigue teniendo molestias, se quita el parche y el ojo rojo, le duele, vuelve a ir a urgencias y medio la riñen porque según ellos se ha estado frotando el ojo y se lo ha irritado más, otra vez pomada y vendaje, otra vez ciega para casa. Pasa el día con molestias otra vez, además de no ver nada, claro. Al día siguiente está que no se aguanta, el ojo con una pinta fatal y como en urgencias ya no se fía pide hora con su oculista de siempre. Cuando la vio se echaba las manos a la cabeza, tenía un trozo de lentilla dentro del ojo, por eso tenía tanto dolor y la córnea cada vez más irritada, dos visitas a urgencias y no lo ven, tenía infección, un panorama guapo. Al final antibióticos, ojo tapado varios días con curas y nada de lentilla en una buena temporada. Se ha pasado la Semana Santa ciega total, dependiendo de nosotros para todo y todo porque no la supieron mirar bien en urgencias. Y menos mal que la cosa ahora está controlada que si no... Es para denunciar.