martes, 12 de septiembre de 2006

El barco

Mece las velas brisa ligera,
y se desliza ajena en cubierta,
agua de la pasada tormenta,
recuerdo mudo de una ira fiera.

Desde las profundidades llega
un lamento triste y audible apenas,
es el llanto de un alma que anhela
que termine este tiempo de espera.

Pues en la proa el barquero rema,
navega rápido sin errar,
camino a la despedida eterna,
inicio de incontrolable pena.


Escuchando: Mary Black - My Donald

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy bonito, aunque supongo que es más autobiográfico que literario :)

Ferguson dijo...

La respuesta es:

Titanic

He ganado?

Miauz dijo...

Alfonso: cualquier cosa que se escribe es autobiográfico, no podemos ser objetivos ni queriendo.

Ferguson: No, no es el Titanic... ¿tú te imaginas lo cachas que tendría que estar el barquero para mover el titanic él solito?

Ana dijo...

Hola! Solo queria saludarte un momento. Aquí estoy desde Sigüenza (desde el parador, un castillo), que me he conectado un momento. A ver si la semana que viene saco un hueco y renuevo mi blog. Un besito!